La atención plena es prestar atención aquí y ahora con amabilidad y curiosidad.

En los grupos de entrenamiento básicamente tratamos de transmitir una serie de aspectos para la práctica que esencialmente serían:
  • Tomar conciencia de la respiración. Si ritmo, profundidad, movimientos…
  • Darse cuenta de los pensamientos a medida que pasan a través de la mente y cómo cambian y juegan ante distintos estados de ánimo o activación.
  • Sentir las distintas sensaciones físicas y los contenidos cognitivos que asociamos a una emoción.
  • Observar y sentir el cuerpo en reposo y en movimiento, y ante distintos estados de ánimo o activación.
  • Prestar atención a  la información que nos llega del exterior a través de los sentidos.
  • Reconocer la capacidad de elegir en vez de reaccionar automáticamente ante diversas situaciones en especial, situaciones de estrés.
  • Practicar el envío de bondad hacia uno mismo y los demás.

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